Llevo un tiempo (desde que el 22 de julio he pasado a la condición de "viejo") en el que vuelven a mi recuerdos, imágenes, reflexiones, que me están haciendo descifrar enigmas que, como el de nuestra infancia -la infancia en general- viene a significar ese estado en el que se determina la capacidad que tenemos esta especie que llamamos humana, de hacer cosas terribles y hermosas al mismo tiempo. Y, en mi caso, el teatro siempre en el centro, tan pequeño y a la vez tan enormemente importante en mi vida, para llenarme la cabeza de preguntas y pensamientos con los que he imaginado caminos desde los que rebelarme contra lo que me dijeron era inevitable. Y aquí sigo, con un hartazgo de ser siempre víctima de la historia que nos contaron -me contaron-, porque todo es infancia desde la que reconducir la memoria con recuerdos y hermosas certidumbres, alimentándonos así del maná que nos haga demostrar que no se borra la infancia con la edad. No. Se queda con nosotros en forma de alacena repleta de manjares del alma que nos alimentarán el resto de nuestra vida.
PorFinBlog
Qué hacer ahora que nos hicimos payasos como una burda imitación de los juegos de la infancia, cuando la espada de madera que nos construyó el abuelo nos golpeaba, sin que supiéramos que era el filo de la vida.
Qué hacer ahora que estamos detenidos en la última imagen de la humedad del ojo, esperando el regreso de los perros infinitos que ladran con un doble nudo en la esperanza, rumbo al lugar donde mañana recogeremos lo que nos toca de locura.
Cuánta herejía en el costado del sol y de los hombres, cuánto polvo colmando los rincones y las tejas de la casa, donde antes la lluvia bendecía con sus cauces de agua el cuento feroz de los ahorcados, y las historias de fantasmas que con un hilo de voz nos decían los mayores al anochecer.
Cae sobre las casas y las calles enfangadas el primer mordisco de la noche, y ahí está mi padre sentado en la ventana alta, moldeando la herramienta que detiene el tiempo, conjugando un mínimo y cómplice solsticio para la próxima estación de aves migratorias.