Pequeña DENUNCIA en "tiempos de rabia" por la invisibilidad que, como norma, han tenido nuestros proyectos y "acciones dramáticas" para las instituciones de esta "sacrosanta provincia", con el objetivo de "mover las conciencias" de quienes ostentaron y ostentan el poder cultural, para que el teatro (y sus agentes) sea de verdad esa "herramienta de cambio social" que, por su naturaleza, es. SIN ACRITUD.
PorFinBlog
Tras el estreno y la pequeña (pero satisfactoria) gira que hicimos este verano de nuestra más reciente producción escénica, "Ellas... El Teatro", todo el equipo que la hizo posible nos hemos quedado con un ingrato vacío pero con una enorme sensación de PAZ, porque estamos convencid@s de que nuestra manera de luchar por la igualdad a través de este arte efímero y eficaz, merece ser disfrutada por quienes habitan en esta tierra en los espacios históricos que tiene nuestra provincia. Queremos que nuestras "troyanas" (hoy como ayer) sigan dignificando su condición femenina, queremos que Hécuba, Medea, Antígona, Ofelia, Nora y Adela sigan poniendo su lucha para conseguir la igualdad que nos hará libres como seres humanos, pues cuando entendamos que la tolerancia y el respeto a la diversidad forma parte de nuestro ADN, seremos verdaderamente LIBRES.
Gracias NANI, PILAR, GREGORIO, ENCAR, CARMEN, LAURA, LOLA, SONIA, EVA, SAMUEL RUIZ, JOSÉ ANTONIO, DANIELA, ERIK, SAMUEL BLANCO, ACEITES DE ORIGEN, AREA DE CULTURA DE DIPUTACIÓN PROVINCIAL, AYUNTAMIENTO DE TORREPEROGIL (CONCEJALÍA DE IGUALDAD), ELEMENT SONIDO E ILUMINACIÓN PROFESIONAL, JOSÉ CARLOS LARA, JOSÉ LUIS GUERRERO Y A LOS MÁS DE 1000 JIENENSES que han podido ver redivivas de nuevo a estas heroínas adelantadas a su tiempo. Esperamos seguir contando con la confianza del Área de Cultura de la Diputación Provincial para que el próximo año "Ellas... El Teatro" pueda llevar su mensaje a más pueblos de esta tierra.
Los próximos días 24 y 25 de febrero, en el Centro Cultural "Alfonso Fernández Torres" de Torreperogil, desde nuestra Asociación Teatro Arena presentaremos el "I Festival Teatreando en Familia" (Jornadas de Teatro Inclusivo), con la participación de la Escuela Municipal de Teatro "Ricardo Iniesta" de Úbeda y el Grupo "Tiflonuba Teatro" de Huelva. Serán dos momentos para disfrutar de este teatro de integración que estos dos colectivos vienen trabajando desde hace más de una década, con personas con diversidad funcional, en una lucha continua porque una sociedad sin barreras, visible para todos, sea posible.
Os invitamos a disfrutar con este "otro teatro", este ARTE CON MAYÚSCULAS que personas diferentes hacen con una profesionalidad que ya quisieran muchos "santones" del arte acomodaticio y sin barreras que todos disfrutamos. Serán dos propuestas diferentes, pero marcadas por la diversidad funcional, con las que desde nuestra butaca de espectador podremos sacar la reflexión que cada una nos aporte. Por un lado "El gato manchado y la gaviota sin nombre" por la EMT "Ricardo Iniesta" y, por otro, "La eterna herencia" por el Grupo "Tiflonuba Teatro". Os esperamos
Lo siento, pero si no lo digo, reviento. El tiempo pasa. Miro mi DNI y veo que he superado ya los sesenta. Me digo: "chaval, no te queda más remedio que ir haciendo balance de lo que pudo ser y no ha sido". Realidad triste y difícil de aceptar, ya que desde 1979 (primero como Teatro "Arena" y ahora como "Porfinteatro") hemos hecho más de 60 creaciones que, sin embargo, se han olvidado de manera natural, con el beneplácito de una clase política (cercana y lejana) que se esmeró en señalar y bautizar como "cosa marginal", y a la que jamás reconocieron su significado real: trabajos diferentes que sembraron el suelo de esta sacrosanta tierra con un pensamiento imprescindible, por políticamente incorrecto y poéticamente excepcional.
Está mal que yo lo diga, pero si de algo estoy orgulloso es de poder decir, mirando atrás, que perpetré junto a tantos amigos y enemigos, la tarea minuciosa de obrero eficaz, que consistía en la invención de oxígeno. Pero lo voy a llamar "aire fresco", porque el oxígeno que fabrican los artistas nunca se presenta a primera vista como "recuperador" y no debería ser de fiar. El arte hace daño, amigos...
La cosa es que hoy, en que me ha dado por ir superando el cansancio que me aploma (¡este agosto traidor!), me doy cuenta que todos estos años nos han estado timando. Nos tima y nos chulea la Junta. Nos tima la Diputación. Y por si fuera poco hay que aflojar pasta en impuestos para que se produzcan y contraten trabajos escénicos que te dejan, al final de la representación, como una vaca mugiendo desconciertos y naderías.
Treinta y ocho años dándolo todo por la cultura en esta parte de Al-Ándalus, para que ahora veas cómo la gente se zampa bodrios sin "denominación de origen", que se alientan desde las instituciones rellenando zonas predispuestas a lo hueco, al abandono, al desierto planificado. Ingeniar chorradas para conservar un puesto de trabajo es infame. Pero hacer gilipolleces por desinformación, mueve a risa. Si los gestores de cultura que nos rodean no saben nada de artes escénicas y desconocen por completo nuestra realidad teatral, que se marchen. ¿Quién los ha puesto ahí? Son de la mismo hornada de los que pretendían hacernos creer que nuestro teatro no valia para nada. Los mierdas íbamos a parar, por norma, por subvenciones ridículas, por nula repercusión en los medios que nunca nos hacían caso, por exigencias imposibles de cumplir para empresas en formación, a los basureros. Mientras tanto los "artistas oficiales" cobraban salarios dignos, salían en la foto y eso les daba el pasaporte falso de creadores. Y hacían y siguen haciendo a Lorca y Valle-Inclán, porque eso les da la etiqueta de "progres", sin conocer siquiera la profunda poesía que emanan esos textos.
El fuego está por todas partes, pero, afortunadamente, aún la poesía tiene a bien abrirnos senderos en el peligro. Esa poesía la pone en circulación mucha gente en sus vidas cotidianas, lo que pasa es que no nos fijamos bien. Y algunos todavía la sueltan en escenarios, frente a un público desconocido y exagerado, soñando. Siempre conviviremos con las llamas, pero "es guapo" -como dice mi amigo Goyete- descubrir caminos entre el fuego. Si lo sabes apreciar, tanto calor alrededor, lejos de consumirte, acabará trabajando a favor de tu ansia de esperar.
¿Dónde queda el país donde todos se reúnen? ¿Atrás, adelante, abajo, arriba, queda ese país?
Por ahora en la muerte todos se reúnen, por ahora se reúnen en la muerte. Atrás del que dejaron, del que bajaron, debajo de los que amaron.
Sombras reunidas de una vez. País donde todos se reúnen salvo el tiempo que vendrá, más justo, donde juntarse vivos y muertos que quisieron la libertad, que te quisieron, libertad.
Qué hacer ahora que nos hicimos payasos como una burda imitación de los juegos de la infancia, cuando la espada de madera que nos construyó el abuelo nos golpeaba, sin que supiéramos que era el filo de la vida.
Qué hacer ahora que estamos detenidos en la última imagen de la humedad del ojo, esperando el regreso de los perros infinitos que ladran con un doble nudo en la esperanza, rumbo al lugar donde mañana recogeremos lo que nos toca de locura.
Cuánta herejía en el costado del sol y de los hombres, cuánto polvo colmando los rincones y las tejas de la casa, donde antes la lluvia bendecía con sus cauces de agua el cuento feroz de los ahorcados, y las historias de fantasmas que con un hilo de voz nos decían los mayores al anochecer.
Cae sobre las casas y las calles enfangadas el primer mordisco de la noche, y ahí está mi padre sentado en la ventana alta, moldeando la herramienta que detiene el tiempo, conjugando un mínimo y cómplice solsticio para la próxima estación de aves migratorias.